MasterCard ha desarrollado una tecnología revolucionaria que busca reemplazar las tarjetas de crédito tradicionales con tokens aleatorios para realizar pagos, aumentando la seguridad y simplicidad para los usuarios. Además, la compañía está apostando por la autenticación biométrica, como el escaneo de la palma de la mano, en lugar de los números de tarjetas o códigos PIN. La implementación de esta nueva tecnología requiere la colaboración con bancos, empresas Fintech y comercios a nivel global, y se espera que para el año 2030 el 100% de las transacciones se realicen utilizando este sistema. Este cambio histórico en los pagos podría significar la eliminación completa de las tarjetas de crédito físicas y marcar el inicio de una nueva era en el sector financiero, con desafíos pero también grandes oportunidades de innovación y eficiencia.